POR RAÚL A. RUBIO CANO
Ayer, harto el pueblo de México dijo ¡Basta! con su voto, a las políticas económicas Neoliberales que por más de 30 años han ofrecido un vil sometimiento y severa destrucción en todos los planos de la vida de los mexicanos. El pueblo votó por un nuevo manejo de la relación Capital-Trabajo Asalariado, que es la que ofrece Andrés Manuel López Obrador para salir de ese oscurantismo que los tecnócratas neoliberales fincaron en el país, convirtiéndolo en una fábrica de pobres, un saqueo sin piedad alguna de sus riquezas y esfuerzos laborales y así, llevándonos a la corrupción e impunidad jamás vista. Hoy, esos mega saqueadores de los bienes del pueblo y de sus bolsillos, les empezará a llegar su fin, va muy en serio la lucha de AMLO contra la corrupción e impunidad, una realidad que llega a más de los 500 mil millones de pesos por año y que con ese dinero, éste se inyectará al desarrollo del país. Como dijo Obrador anoche, en su rueda de prensa como candidato a la presidencia ya electo por los primeros conteos: se acabó “un gobierno de unos cuantos” y más tarde, en el Zócalo de la Ciudad de México, ofreció: “Un gobierno del pueblo y para el pueblo y… con el pueblo”. Y esto es lo que pone a temblar a esos “cuantos” porque por ejemplo, ayer giró mensaje en las redes el periodista David Carrizales del periódico El Universal, diciendo que el Diablo Fernández (el de FEMSA) en la madrugada del domingo, andaba haciendo “su luchita” para que la gente no votara por AMLO y claro, esa selecta clase que hace su riqueza de la cerveza, la Coca Cola y otros business, pues ven que con la llegada de AMLO se les acabó el negocio de andar urbanizando nuestra ciudad a su antojo y bienestar de sus capitales y no, al bienestar de sus habitantes y medio ambiente. Se les acabó el tener un Estado arriba del Estado de Nuevo León, entidad que crearon mediante una Junta de Notables llamada Consejo Nuevo León de Planeación Estratégica (de la cual se jacta haberlo ideado, Calos Salazar Lomelín, claro con el sometimiento de Rodrigo Medina) y que sigan haciendo de las suyas con los Distritos Urbanos que quieren imponer como el Distrito TEC a vecinos y destruir vidas y patrimonios; el Distrito Independencia; el agandalle del Río Santa Catarina; la Interconexión Monterrey-San Pedro; el “Memorial de la Misericordia”; el control y negocio del agua por el Fondo del Agua Metropolitano de Monterrey, su injerencia en la educación pública, el manejo de la Seguridad con muy cuestionados cuerpos policiacos como Fuerza Civil, etcétera, etcétera. La llegada de AMLO, es un hasta aquí a esa barbarie del saqueo, inestabilidad y supina ignorancia o, evidente maldad para el enriquecimiento de los intereses de unos cuantos. No es posible que productores y vendedores de cerveza y Cocacolas, quieran seguir rigiendo la vida de una ciudad metropolitana, su agua y su río ¡Órale! raurubio@gmail.com